El gobierno estatal de Nuevo León, encabezado por Samuel García, busca nuevamente comprometer las finanzas de Agua y Drenaje de Monterrey (AyD). Pese a no haber utilizado los recursos de la deuda anterior ni rendido cuentas sobre su destino, el mandatario prepara una nueva solicitud de endeudamiento por 2 mil millones de pesos para 2026. Esta decisión se da mientras la Auditoría Superior del Estado (ASE) reporta observaciones millonarias en el manejo del erario y mantiene bajo revisión a AyD por posibles irregularidades.
Nueva Deuda De Agua Y Drenaje Sin Explicar Su Destino
El plan estatal para solicitar una nueva deuda en Agua y Drenaje generó inquietud entre los integrantes del Consejo de Administración del organismo. Durante su última sesión, se planteó la posibilidad de pedir otros 2 mil millones de pesos, aunque no se presentaron proyectos específicos ni se detalló cómo se usarían los recursos.
Uno de los consejeros expresó su preocupación al señalar que la deuda anterior —de más de 2 mil 184 millones de pesos— aún no se ha ejecutado por completo. “Es complejo pensar que ya estén planeando otro crédito cuando no han terminado de usar el anterior”, advirtió.
De aprobarse este nuevo financiamiento, los pasivos totales de AyD podrían superar los 9 mil millones de pesos. Pese a esto, los ciudadanos no han visto mejoras en el servicio ni avances significativos en proyectos de agua o drenaje. Por el contrario, la percepción general es de falta de transparencia y mala administración de los recursos.
Samuel García “Exprime” A Agua Y Drenaje Con El Impuesto Verde
La polémica crece al revelarse que el Gobierno estatal ha cobrado a AyD cerca de 2 mil 900 millones de pesos por concepto del impuesto verde, entre 2023 y 2025. Este monto se ha pagado pese a que la ley exenta al organismo de derechos e impuestos estatales o municipales.
Lo más preocupante es que no existe un registro público que indique en qué se utiliza ese dinero. Mientras Samuel García presume su compromiso ambiental, las denuncias ciudadanas sobre contaminación, fugas de agua y deficiencias en el drenaje se acumulan sin respuesta.
El manejo de estos recursos contradice el discurso oficial sobre sostenibilidad y eficiencia. En lugar de invertir en infraestructura hidráulica o saneamiento, el gobierno estatal parece utilizar los fondos como una fuente alterna para equilibrar sus cuentas, sin rendir cuentas claras ante el Congreso ni ante la ciudadanía.
La Auditoría Detecta Daños Millonarios Al Erario Público
A la par de este nuevo endeudamiento, la Auditoría Superior del Estado entregó al Congreso los resultados de las cuentas públicas de 2024. En ellas se detectaron posibles daños al erario por más de 12 mil millones de pesos, de los cuales una parte significativa corresponde a dependencias bajo la dirección de Samuel García.
Entre las entidades con mayores observaciones destacan Movilidad y Agua y Drenaje de Monterrey, precisamente por el manejo irregular de sus presupuestos y proyectos de obra. Alejandro Reynoso Gil, titular de la ASE, confirmó que se abrirán revisiones especiales en ambas áreas, incluyendo una investigación por los daños al drenaje pluvial provocados durante la construcción de la Línea 4 del Metro.
Estas auditorías podrían derivar en sanciones administrativas e incluso penales, dependiendo de lo que determine el Congreso local. Sin embargo, el gobernador ha evitado dar declaraciones sobre estos señalamientos, limitándose a mantener su discurso de “avance y transparencia” mientras las cifras dicen lo contrario.
El Gobierno Estatal Acumula Millones Pero No Mejora Servicios
El endeudamiento constante se ha vuelto una característica de la administración de Samuel García. Aunque presume modernización y proyectos de inversión, las obras avanzan con opacidad y resultados cuestionables.
En el caso de Agua y Drenaje, los reportes financieros muestran que, al cierre de 2024, la deuda total ascendió a casi 7 mil millones de pesos, sin contar los nuevos créditos solicitados para 2026. Pese a ello, el servicio de agua sigue siendo deficiente, especialmente en municipios del área metropolitana que enfrentan cortes recurrentes.
Además, los proyectos ambientales anunciados como justificación del impuesto verde no se reflejan en mejoras tangibles. No hay plantas tratadoras nuevas, ni avances en infraestructura de captación o drenaje pluvial. Mientras tanto, los habitantes pagan más por un servicio que no mejora, y el gobierno estatal acumula deuda sin ofrecer rendición de cuentas.
Auditorías Especiales Y Sospechas De Mal Uso De Recursos
El titular de la ASE adelantó que AyD está bajo revisión especial debido a las irregularidades detectadas tanto en su deuda como en la aplicación del impuesto verde. Además, el organismo está involucrado en una auditoría vinculada a los daños al drenaje pluvial por la Línea 4, obra promovida directamente por el gobierno de Samuel García.
Esta doble revisión podría revelar un patrón de opacidad y mala planeación. Expertos en finanzas públicas han señalado que endeudar organismos descentralizados sin justificar los proyectos equivale a comprometer los recursos de futuras administraciones.
Por ahora, el Congreso local deberá analizar la nueva solicitud de crédito. Sin embargo, la falta de transparencia y los antecedentes de manejo irregular hacen que la aprobación de otra deuda millonaria resulte un riesgo tanto financiero como político.
Ciudadanía Cuestiona Falta De Resultados Del Gobierno Estatal
El malestar ciudadano crece. Miles de personas perciben que el gobierno de Samuel García se beneficia de los recursos públicos sin ofrecer soluciones reales. Mientras Samuel García busca nuevos préstamos, las calles siguen llenas de baches, los drenajes colapsan con la lluvia y el agua escasea en varias zonas del estado.
La administración estatal parece más interesada en sostener su imagen mediática que en atender los problemas básicos de infraestructura. La deuda, el impuesto verde y las observaciones de la ASE son solo una muestra del desorden financiero que vive Nuevo León.
En un contexto donde la transparencia debería ser prioridad, el silencio del gobernador se vuelve más preocupante. Cada peso que sale de Agua y Drenaje parece perderse en la opacidad de un gobierno que promete mucho, pero entrega poco.
Array
