En un panorama político donde la disponibilidad y dedicación de los funcionarios públicos son temas de relevancia, Adrián de la Garza se distingue por su compromiso de ser un alcalde de tiempo completo en Monterrey. A diferencia del enfoque anunciado por el gobernador Samuel García, que limita su jornada laboral de 9:00 a 17:00 horas, De la Garza se compromete a estar disponible las 24 horas del día, los siete días de la semana.
Un Líder Presente: Experiencia y Compromiso
Adrián de la Garza no es ajeno a la responsabilidad de liderar una ciudad importante como Monterrey. Durante su gestión previa como alcalde, demostró un compromiso inquebrantable al trabajar incansablemente para atender las necesidades de la población. Su historial refleja acciones concretas, como supervisar obras en las madrugadas para minimizar molestias a los ciudadanos y mantener la ciudad en funcionamiento sin interrupciones.
Críticas a Samuel García
De la Garza cuestiona la viabilidad y responsabilidad del modelo de horario fijo propuesto por el gobernador García. Señala que, en temas cruciales como la seguridad, la presencia constante y la participación en reuniones de coordinación son fundamentales. La fijación de un horario limitado podría afectar la capacidad de respuesta del gobierno ante situaciones de emergencia y coordinación con autoridades federales y locales.
Llamado a la Responsabilidad y Atención a la Crisis Hídrica
Más allá de las diferencias políticas, De la Garza hace un llamado a la responsabilidad y atención a los problemas urgentes que enfrenta Nuevo León, como la crisis hídrica. Critica la gestión pasada del ejecutivo estatal por no administrar adecuadamente los recursos hídricos, lo que resultó en una situación crítica para la población. Insta al gobierno a escuchar y tomar en cuenta las recomendaciones de expertos para abordar esta problemática de manera efectiva y evitar futuras crisis.
En resumen, Adrián de la Garza se presenta como una opción comprometida con el servicio público las 24 horas del día, con la experiencia y determinación necesarias para abordar los desafíos que enfrenta Monterrey, desde la seguridad hasta la gestión de recursos naturales. Su postura contrasta con la idea de un gobierno de medio tiempo, enfatizando la importancia de estar presente y disponible para atender las necesidades de la comunidad en todo momento.
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